Etapa 8 - (8) Vejez 66 años en adelante - Integridad vs. desesperacion - Sabiduría - El género humano
Señor, acuérdate no sólo de los hombres y mujeres de buena voluntad,
sino también de aquellos de mala voluntad. Pero no sólo te acuerdes del
sufrimiento que nos han infligido; acuérdate de los frutos que hemos
dado gracias a este sufrimiento -nuestra camaradería, nuestra lealtad,
nuestra humildad, el valor, la generosidad, la grandeza de corazón que
han salido de todo esto- y cuando estas personas lleguen al juicio,
permite que todos los frutos que nosotros hemos dado sean su perdón. p.
227.
Mientras escuchabamos hablar a mi papá de sus pasadas
generaciones y de cómo estas cuidaban la tierra, todos estabamos
experimentando uno de los atributos que Erikson sugiere para la
integridad o sabiduría en la vejez. "Es un sentido de camaradería con
hombres y mujeres de épocas distantes y de distintos oficios, quienes
crearon órdenes, objetos y dichos que transmitían dignidad humana y
amor". Además de la camaradería con el pasado, Erikson sugiere que la
integridad y la sabiduría también significan la aceptación de la propia
vida. "Es la aceptación de nuestro propio y único ciclo vital y de la
gente que se ha vuelto significativa en él... libre del deseo de que
estas personas hayan sido diferentes, y una verdadera aceptación del
hecho de que la vida de uno es su propia responsabilidad". Lo que más me
impresionó mientras mis padres hablaban era su capacidad de mirar hacia
atras y de descubrir cómo habían crecido a partir de todo lo que les
había ocurrido. Ellos no deseaban en absoluto que "las cosas hubieran
sido diferentes". Ya fuera en la Gran Depresión cuando sus familias
habían bregado juntas y habían compartido, o ya fuera en la muerte de mi
hermano John, quien les había abierto el corazón para adoptar a mi
hermana Mary Ellen, ellos compartían con nosotros cómo esas aparentes
tragedias se habían convertido en una fuente de crecimiento para ellos.
p. 229.
Tuve que decidir en ese momento si me iba a permitir
odiar a los soldados que habían hecho esto. Realmente fue una decisión
fácil. Yo era abogado. En mi práctica profesional había visto con
frecuencia lo que puede hacer el odio en la mente y el cuerpo de la
gente. El odio simplemente había matado a las seis personas que más me
importaban en el mundo. Decidí entonces que pasaría el resto de mi vida
-ya fueran unos cuantos días o muchos años- amando a cada una de las
personas con las que entrara en contacto. p. 231.
Erikson amplía
esta lista y describe cómo los ancianos pueden experimentar una
disminución en cualesquiera de las ocho etapas de la vida. "Los
pacientes viejos parecen penar no nada más por el tiempo que se ha ido y
el espacio que se ha quedado vacío, sino también ... por un
debilitamiento de la autonomía, una pérdida de iniciativa, una carencia
de intimidad, un abandono de la generatividad, para no hablar de
potenciales de identidad que han pasado de lado o, desde luego, por
haber vivido con una identidad demasiado limitada". p. 233.
Mientras
más pronto nos preguntemos: "Qué necesito hacer antes de morir?", más
significado tendra la vida que nos resta. Nunca es demasiado tarde para
cambiar la dirección de la vida, como hizo Alfred Nobel, fundador del
Premio Nobel para los logros más destacados en las artes y en las
ciencias. Siendo un químico sueco, Nobel amasa su fortuna inventando
dinamita y explosivos ideales para las armas. Cuando murió su hermano,
un periódico accidentalmente publicó la esquela de Alfred. Asi, Alfred
tuvo la oportunidad unica de leer su propio obituario y ver cómo sería
recordado para la posteridad. Le impresionó sobremanera leer que se
Ie recordaba por haber hecho una fortuna poniendo a los ejercitos en
capacidad de lograr nuevos niveles de destrucción masiva. Entonces,
determinó cambiar el rumbo de su vida antes de morir. Hoy lo recordamos
porque poco tiempo después de esa anecdota utilizó su fortuna para
fundar el Premio Nobel, que anualmente premia los trabajos de
investigación que mas beneficien a la humanidad.p. 235.
En la
etapa de la integridad, entre más resolvemos los asuntos inconclusos de
nuestra vida, más preparados estamos para dar la bienvenida a la más
grande de las disminuciones: la muerte. Al final de la conferencia de
Bill grabada en videocaset, Bill nos dice que resume a una persona sabia
que ha vivido bien la etapa de la integridad: "Amo la vida y hay muchas
cosas que me gustaría hacer. Pero este taller es absolutamente la
última cosa que necesito hacer. De ahora en adelante tengo el calendario
abierto". p. 238.
Cómo sanar las ocho etapas de la vida, Matthew Linn sj, Sheila Fabricant, Dennis Linn, Ed. Patria, Mexico, 2004, p. 227.