Aquellos en quienes el espíritu aprendió a orar en verdad

 Aquellos en quienes el espíritu aprendió a orar en verdad, hablan al Señor frente a frente, son como los que hablan al oído del emperador. Aquellos que oran con su boca nos recuerdan a los que se prosternan ante el emperador en presencia de toda la corte. Aquellos que viven en el mundo son como los que dirigen su súplica al emperador desde la confusión de la multitud. Si habéis aprendido debidamente el arte de la oración, no habrá en esto nada nuevo para vosotros.


Juan Clímaco o de la Escala citado en La Filocalia de la oración de Jesús, 7a. ed., Salamanca, Ediciones Sígueme, 2004, p. 100.

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