Realizar en Dios todas nuestras acciones

La oración ininterrumpida consiste en mantener el espíritu sometido a Dios con una gran reverencia y un gran amor, sostenerlo en la esperanza de Dios, realizar en Dios todas nuestras acciones y vivir en él todo lo que nos sucede.


Máximo el Confesor, citado en La Filocalia de la oración de Jesús, 7a. ed., Salamanca, Ediciones Sígueme, 2004, p. 127.

Entradas más populares de este blog

B-El sendero (Biblia) de la vida recta

12. La flagelación de Cristo

Espera, espera, que no sabes cuándo vendrá el día ni la hora