Catecismo de la Iglesia Católica, Conferencia Episcopal de Colombia, 1993, No. 1454. Ef 4-6 Progresemos hacia el hombre perfecto 4 1 Yo, «el prisionero de Cristo», les exhorto, pues, a que se muestren dignos de la vocación que han recibido. 2 Sean humildes y amables, sean comprensivos y sopórtense unos a otros con amor. 3 Mantengan entre ustedes lazos de paz y permanezcan unidos en el mismo espíritu: 4 un solo cuerpo y un mismo espíritu, pues ustedes han sido llamados a una misma vocación y una misma esperanza. 5 Un solo Señor, una sola fe, un solo bautismo, 6 un solo Dios y Padre de todos, que está por encima de todo, lo penetra todo y está en todo. 7 Cada uno de nosotros ha recibido su talento y Cristo es quien fijó la medida de sus dones para cada uno. 8 Pues se dijo: Subió a las alturas, llevó cautivos, y dio sus dones a los hombres. 9 Esto de subió, ¿qué significa sino que bajó al mundo inferior? 10 El mismo que bajó, subió después por encima de todos los cielos para llenarlo todo...