Aferrarnos a Él y dejarnos conducir por Él

 “Pretendemos com-prender a Dios, y Él no nos deja de sor-prender. Nos empeñamos en atrapar el Misterio para manejarlo a nuestro antojo, en vez de aferrarnos a Él y dejarnos conducir por Él.”


Pasaje de: Otón, Josep. “La mística de la Palabra.” Grupo de Comunicación Loyola. iBooks. 

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